Efectivos de la Guardia Civil en La Rioja, han desmantelado en el término municipal de Logroño el primer laboratorio clandestino de producción sistemática de marihuana, cuya explotación estaba gestionada y controlada por ciudadanos de origen asiático.

 

Esta actuación que “continúa abierta” supone el primer golpe que asesta la Guardia Civil en esta Comunidad Autónoma, a una organización criminal de origen asiático dedicada al cultivo y elaboración de drogas. Las diferentes pruebas e “indicios evidentes” recopilados durante la investigación han permitido la identificación de uno de sus integrantes.

Cultivan en España para distribuir en Europa

Las organizaciones criminales de origen asiático gestionan en España grandes laboratorios tipo Indoor para el cultivo intensivo del cannabis-sativa, contando con lo último en cuidados y tecnología para tratar genéticamente las plantas y multiplicar su producción, exportando el producto final a países como el Reino Unido, Holanda y Bélgica donde el precio de este tipo droga es tres o cuatro veces superior al que se paga en España.

El laboratorio desmantelado en Logroño llegaba a producir hasta cinco cosechas al año, dos más de lo habitual en los cultivos de interior, lo que permitía a la organización criminal llegar a obtener unos beneficios brutos anuales con la venta de la droga en los países citados, superior a los 2.500.000€.

Condiciones precarias e insalubres

Durante las actuaciones ha quedado constatado que en el interior de la nave industrial vivían varias personas, que eran las encargadas de asegurar un ambiente óptimo durante el cultivo de la marihuana mediante la renovación de aire, humedad, luz o temperatura necesaria, llevando a cabo estos cometidos bajo condiciones higiénico sanitarias absolutamente deplorables de suciedad y putrefacción.

La investigación

Se enmarca dentro de los diferentes dispositivos policiales enfocados a la lucha contra el tráfico de drogas, entre los que se encuentra el análisis que la Guardia Civil en La Rioja realiza a todas las informaciones que de manera anónima aportan los ciudadanos de esta Comunidad Autónoma.

Varias de estas informaciones facilitadas por vecinos logroñeses llevaron a la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil en La Rioja, hasta una nave de 3.000 m² ubicada en uno de los polígonos industriales del término municipal de Logroño, que contaba con fuertes medidas de seguridad y con sistemas de opacidad para impedir reconocimientos visuales desde el exterior, por lo que los investigadores solicitaron la pertinente autorización para su entrada y registro.

100.000 € de inversión

Una vez concedida se accedió a la nave y se descubrió que en su interior se había instalado un completo laboratorio clandestino tipo “indoor” propio de las grandes organizaciones criminales, de 500m², dividido en doce partes y dotado con lo último en sistemas de cultivo y en tecnología domótica, para acelerar el régimen natural de crecimiento y floración de la planta “cannabis sativa”, habiéndose llegado a invertir en su montaje y puesta en marcha más de 100.000€.

En total la instalación contaba con 3.851 plantas de marihuana en distintas fases de crecimiento, 6 depósitos con una capacidad de 3.060 litros para el riego por goteo, bombas de superficie, aparatos de aireación y filtros de carbono para depurar el olor, además de un avanzado sistema de iluminación compuesto por 400 lámparas de entre 600 y 1.200 watts, control de fotometría, temperatura, humedad, medidores de ph y gran cantidad de abono y fertilizantes para el desarrollo y floración de las plantas.

Enganche ilegal a la red eléctrica pública

Para que el laboratorio funcionara a pleno rendimiento se había practicado un enganche ilegal a la red eléctrica pública del polígono industrial, mediante una canalización de obra, de este modo maximizaban beneficios y minimizaban costes de producción, estimándose la cantidad de fluido eléctrico defraudado a los 65.000€.

Además, en otras zonas de la nave se hallaron los espacios dedicados a secar y embalar la marihuana tras su recolección, así como los destinados a dormitorios, cocina y baño que utilizaban las personas de origen asiático que controlaban el buen funcionamiento del laboratorio durante las 24 horas del día.

Cabe destacar que este laboratorio supera en plantas y dimensiones al hallado en la ciudad jarrera” de Haro durante la denominada Operación Apostaxi, desde el que se abastecía de marihuana a toda la provincia de La Rioja y a diversas comunidades limítrofes.