Acompañada de la consejera de Salud, Sara Alba, y del director del Área de Salud, Alberto Lafuente, la presidenta del Gobierno de La Rioja, Concha Andreu, ha visitado esta mañana el Hospital San Pedro de Logroño para conocer su nueva Área Polivalente de Críticos.

Este nuevo control, ya en funcionamiento, duplica la capacidad del Sistema Público de Salud de La Rioja para atender a los pacientes críticos, alcanzando una disponibilidad de 32 camas respecto a las 17 que contemplaba inicialmente el Hospital desde su puesta en marcha en 2007.

Para Andreu, “hasta ahora, La Rioja era una de las comunidades autónomas con menos camas de intensivos por cada 100.000 habitantes, poco más de cinco. A partir de esta misma semana, nuestra capacidad para atender a los pacientes más graves alcanza las 32 camas para los 315.000 riojanos”. “Esto no es sólo una mejora puntual y exclusiva para hacer frente a futuros brotes de COVID-19, es algo que está aquí para quedarse y para poner la infraestructura del SERIS a la altura que los riojanos merecen”.

Según la consejera de Salud, Sara Alba, “nadie nos ha dado un manual para enfrentarnos al coronavirus, pero el coronavirus nos ha dado el mejor manual para mejorar nuestros servicios asistenciales. El músculo y la flexibilidad que ha demostrado todo el sistema en los momentos más duros nos ha enseñado a ir un paso más allá. Con esta nueva unidad para críticos, ponemos La Rioja al nivel que recomiendan los estándares internacionales”.

Más allá del concepto de UCI

Ubicada en el control destinado anteriormente a pacientes pluiripatológicos, la nueva Área Polivalente de Críticos está concebida para facilitar el seguimiento asistencial de pacientes que requieren cuidados intensivos e intermedios. Cuenta con capacidad para quince pacientes y habitaciones dotadas de avanzados sistemas de monitorización hemodinámica y tratamiento: dispositivos de Ventilación Mecánica no Invasiva e Invasiva, bombas de perfusión, etc.

Durante la visita, el director del Área de Salud, Alberto Lafuente, ha explicado algunos de las adaptaciones que se han producido en la unidad: “El COVID-19 ha resquebrajado algunos de los conceptos tradicionalmente instaurados en los sistemas sanitarios desde hace décadas. Este nuevo control para los pacientes críticos va más allá de lo que se entiende como Unidad de Cuidados Intensivos, parte de un nuevo concepto de servicio donde anestesistas, intensivistas, cardiólogos y neumólogo trabajan de la mano para poner el paciente en el centro del sistema asistencial”.