El Acuario de Zaragoza y la Fundación Tierra Rapaz han unido fuerzas en materia de divulgación científica para la conservación, mediante la realización de charlas-talleres de naturaleza a los niños en este campamento singular.

Así, todos los jueves de Julio y la primera quincena de agosto, los biólogos del Acuario se acercarán hasta Calahorra  para impartir sus clases sobre biología. La semana pasada fue el Biólogo Conservador del acuario Carlos Vicente Buitrago junto a sus colaboradores,  los que sorprendieron a los niños con material biológico digno de una película de ciencia-ficción: huevos de mantas raya, cocodrilos y caimanes, dientes de cocodrilo, mudas de tarántulas y hasta una enorme pitón real vivita y coleando, se han colado esta semana por Tierra Rapaz. Recordar a los lectores, que este Acuario de agua dulce, es el más grande Europa y contiene una increíble diversidad de especies entre las que caben destacar varias en peligro de extinción como los hipnóticos caballitos de mar, peces gigantes del río Amazonas de más de 5m de longitud llamados  Arapaimas, que provocan en el visitante del acuario una sensación indescriptible al pasar a medio metro de distancia,  cocodrilos, caimanes, nutrias y muchos más. Lo mejor es que está  muy cerquita de nosotros a menos de 1h de desplazamiento en coche y que un día en él es sin duda un acierto de divertimento y aprendizaje para toda la familia.

El campamento Tierra Rapaz está transcurriendo con un éxito inesperado al traspasar todas las expectativas de sus fundadores que este año, con el Covid 19, jamás hubieran pensado que a día de hoy se hubiesen superado las  180 plazas y una perspectiva final de más de 200 niños que va a suponer una cifra incluso superior a la de otras temporadas.

María Ríos destaca que «el éxito radica en la calidad pedagógica que imprimen los profesionales de prestigio que acuden al campamento para impartir sus talleres de naturaleza y en el ambiente creado por los biólogos y monitores residentes del campamento, así como en el paraje tan especial en que tiene lugar.”

Por su parte, Luis Lezana asegura que «muchos papás nos dicen que ójala hubiesen tenido ellos en sus tiempos un campamento así. Yo pienso lo mismo, pero tengo la inmensa fortuna de disfrutarlo a diario, creo que es un campamento único, donde los niños desconectan por completo de su rutina y se embarcan en una aventura llena de experiencias imborrables en contacto con seres fascinantes”. No todos los días, un suricato come gusanos sobre tu espalda, un puercoespín te enseña sus púas para que aprendas cómo se defiende de un león, una pitón reticulada se desliza por tus manos, se pueden sentir los dientes de una tarántula observas unas cápsulas alienígenas que son huevos de manta raya, te enseñan los secretos de la cría del lobo ibérico,  lanzas al cielo un águila esteparia, un búho siberiano se posa en tu rodilla y alucinado por su mirada, te das cuenta que es más alto que tú». 

Así es este campamento único que se puede vivir y disfrutar en Calahorra, y desde el parque los fundadores quieren  agradecer a las cientos de familias que traen a los niños,  la confianza depositada en Tierra Rapaz cuyos responsables señalan que «suponemos que ellos saben que nos desvivimos por sus hijos exactamente igual que lo hacemos por los nuestros, que también forman parte del propio campamento.  Este año, con el Covid hemos aprendido a llevar mascarillas de una manera rutinaria, a lavarnos continuamente las manos y a otras cosas necesarias que no han restado el interés ni la alegría de los niños por vivir las experiencias que los animales les proponían».

En ese sentido la pasada semana no pudo ser más prolífica en actos donde los niños aprenden sobre biología y disfrutan de la interacción con la naturaleza apasionante. El lunes llegaron al Campamento los perros de la Asociación de Rescate de Arnedo, el viernes el experto en reptiles Julián Arnáez ha mostrado seres fascinantes, como el gran basilisco de mirada agresiva, el anolis,  o las pitones y las boas, y así, a los largo del verano el campamento será visitado por muchos más  biólogos y entusiastas de la naturaleza que ilustraran a los peques con sus lecciones magistrales de fauna.