En la mañana de este miércoles 20 de noviembre, se ha celebrado en el Parlamento de La Rioja un acto en conmemoración del 30º Aniversario de la aprobación por Naciones Unidas de la Convención sobre los Derechos del Niño, que se aprobó un 20 de noviembre de 1989.

 

En el acto, han participado los consejos de Infancia y Adolescencia de las cuatro localidades en nuestra comunidad autónoma declaradas Ciudades Amigas de la Infancia por UNICEF: Logroño, Arnedo, Alfaro y Calahorra, y en sus intervenciones, portavoces de cada uno de sus consejos han analizado distintos artículos de esta Convención.

En el caso del Consejo de Infancia y Adolescencia de Arnedo, han actuado como portavoces Iván Martínez de Quel Mazo, del CEIP La Estación, y Lucía Moreno León, del IES Celso Díaz, que han desarrollado el artículo 27 de la Convención de los Derechos del Niño, que recoge el derecho a un nivel de vida adecuado para el desarrollo físico, mental, espiritual, moral y social de los niños.

Este artículo determina que los padres son los responsables de aportar lo necesario para vivir de una forma digna (en especial vivienda, nutrición y vestido), y que, de no ser capaces, son las autoridades quiénes deben proporcionarlo.

Al acto han acudido por la delegación arnedana, 16 de los niños pertenecientes al Consejo Infantil de Arnedo, acompañados por docentes de sus centros escolares, así como los responsables técnicos municipales de Participación Ciudadana e Infancia y Juventud. También han estado presentes el Alcalde de Arnedo, Javier García, y la concejal de Participación Ciudadana, Violeta González.

En el desarrollo del acto, además de los niños,  también han comparecido la Consejera de Participación, Cooperación y Derechos Humanos,  Raquel Romero;  Juan Carlos Castroviejo, Presidente de UNICEF La Rioja y el Presidente del Parlamento, Jesús Mª García.

Tras la finalización del acto, los miembros del Consejo Infantil de Arnedo han visitado la exposición situada en La Gota de Leche, realizada por el Consejo de Infancia de Logroño, que profundiza también en el articulado sobre la Convención de los Derechos del Niño.

 

Texto íntegro de la exposición realizada por el Consejo de Infancia y Adolescencia de Arnedo, en relación al artículo 27 de la Convención de los Derechos del Niño.

¿Tenemos derechos los niños?

Ante esta pregunta seguro que los juristas, los filósofos, los psicólogos, los educadores y el 99 % de la sociedad contestarían que sí, ya que los mismos están recogidos en varios textos nacionales e internacionales, y entre ellos y como más importantes, la Constitución Española de 1978 y la Convención sobre los Derechos del Niño de 1989, pero en la práctica, estos derechos fundamentales faltan a millones de niños, incluso en nuestro entorno.

¿Qué dicen estos textos?

La Constitución Española, aprobada en 1978,  en su artículo 39 establece que los poderes públicos  aseguran la protección de la familia y  la protección integral de los hijos, afirma el deber de los padres de prestar asistencia de todo tipo a los hijos y termina diciendo que “los niños gozarán de la protección prevista en los acuerdos internacionales que velan por sus derechos”.

Los tratados internacionales a los que hace referencia son varios pero el más importante es la Convención sobre los derechos del Niño. Este texto, que se aprobó tras 10 años de negociaciones, el 20 de noviembre de 1989, es de obligado cumplimiento para todos los países firmantes. En la actualidad ha sido aceptado y firmado por todos los países del mundo excepto Estados Unidos. Por eso se celebra en todo el mundo el Día Universal del Niño el día 20 de noviembre.

Este texto recoge en 54 artículos los derechos que se consideran indispensables para todos los niños y están basados en cuatro principios básicos: el interés superior del niño, el derecho a la no discriminación, el derecho a la vida , la supervivencia y el desarrollo y el derecho a la libertad de expresión y a ser escuchado.

Este derecho a ser escuchado es lo que se pretende en este foro y en otros muchos que desde hace años se están desarrollando, como los Consejos Infantiles que estamos aquí representados.

El Consejo Municipal de Infancia y Adolescencia de Arnedo ha trabajado durante estos días sobre uno de los artículos de la Convención, el número 27 que se titula “Nivel de vida adecuado” y cuya descripción es:

“Todo niño tiene derecho a beneficiarse de un nivel de vida adecuado para su desarrollo y es responsabilidad primordial de padres y madres proporcionárselo. Es obligación del Estado adaptar medidas apropiadas para que dicha responsabilidad pueda ser asumida y que lo sea de hecho, si es necesario, mediante el pago de la pensión alimenticia”.

 

Pensamos que es difícil de establecer que es un “nivel de vida adecuado” porque para nosotros, los niños del primer mundo, esto puede incluir disponer de ordenador, de teléfono móvil, de dinero para caprichos, etc… pero para un niño del tercer mundo, ese nivel de vida puede ser de supervivencia, pero consideramos que , en general, un “nivel de vida adecuado “ debe contemplar  todos los aspectos para nuestro desarrollo físico, mental, espiritual, moral y social, que se podrían desglosar de la siguiente forma:

-Para nuestro desarrollo físico es necesario que todos los niños tengamos comida, vestimenta adecuada y un hogar confortable para vivir. Es decir, que en cada hogar haya agua caliente, calefacción, etc…También que podamos vivir en un entorno seguro, no acosados por la guerra ni los conflictos y que podamos contar con una sanidad que nos atienda de forma global.

 

-Para nuestro desarrollo mental es necesario que tengamos acceso a una buena educación, a colegios e institutos. Que podamos disponer de libros de texto y de ayuda si la necesitamos en el seguimiento de nuestros estudios.

 

-Para nuestro desarrollo espiritual es necesario que todos los niños podamos expresar nuestro ser interior desde el valor fundamental de la tolerancia.

 

-Para nuestro desarrollo moral, es necesario favorecer entornos de respeto y tolerancia a nuestra identidad y contar con  estabilidad emocional.

 

-Para nuestro desarrollo social es necesario procurarnos actividades de ocio para manifestar nuestras inquietudes, y lugares donde poder llevar a cabo ese tipo de actividades: zonas deportivas, cines, espacios para reunirse, etc…”.

 

Como ya hemos dicho, tenemos suerte de vivir en España, en La Rioja y en Arnedo, donde existen varias organizaciones y administraciones que ayudan a que esto se pueda conseguir. Por ejemplo en Arnedo las organizaciones Cáritas, Cruz Roja y el Ayuntamiento a través de sus Servicios Sociales ayudan a las familias para que tengan las necesidades básicas cubiertas, como son la comida, a través de vales o de alimentos directos, la ropa, la calefacción, los libros, campamentos de verano, etc… pero todavía hay muchas cosas que deberían mejorar y para ello creemos que nosotros podríamos colaborar de dos formas:

 

Por una parte, solicitar a las administraciones algunas medidas.

-Por otra, realizar  nosotros mismos algunas acciones.

 

En cuanto a lo que podríamos pedir a las administraciones de todos los niveles, ya que  estas medidas no están en nuestras manos ni , en muchos casos,en las manos de los ayuntamientos ni incluso en las de las Comunidades Autónomas, hemos destacado:

 

1º) Que las administraciones favorezcan mejores condiciones de trabajo de los padres para que puedan conciliar la vida familiar y laboral y poder estar más tiempo con nosotros.

2º) Que en los casos de separaciones matrimoniales, se revise y se siga mejor el tema de la custodia de los hijos para vigilar que los niños podamos estar con los dos padres.

3º) En cuanto a la educación, que en nuestro municipio exista un centro común con aulas de alfabetización e inmersión lingüística para acoger en un primer momento a los  niños extranjeros  que llegan con desconocimiento del idioma.

4º) Mantener comedores sociales durante el verano, cuando no funcionan los comedores escolares para que satisfagan las necesidades básicas de  alimentación.

5º) Crear aulas   para que los adolescentes que van a pasar a ser adultos puedan realizar cursos o talleres que les inicien en una profesión, como jardinería, albañilería, carpintería, etc… Podría ser algo parecido a las antiguas Escuelas Taller.

 

En cuanto a los que nosotros los niños podemos hacer para colaborar para mejorar las condiciones de vida de algunos de nuestros compañeros, hemos expuesto las siguientes ideas:

 

1º) Donar alimentos, juguetes, libros, enseres, etc… a través de contenedores o en algún local adecuado para que se repartan de forma justa.

2º) Colaborar en las recogidas de alimentos y donar alimentos cuando se nos pidan.

3º) Organizar actos o actividades deportivas para recoger fondos para estos objetivos.

4º) Colaborar con los niños necesitados de apoyo escolar o social o de otros tipos.

5º) Organizar a nivel municipal fiestas interculturales donde a través de la convivencia podamos conocer y valorar mejor otras culturas, ya que esto ayuda a la integración.

 

En resumen, esto es una llamada a los adultos, representado aquí por varias administraciones públicas, y a los propios niños y este manifiesto podría cerrarse con el lema que hemos elegido:

“Un techo, un abrigo y un trozo de pan : mis necesidades para un futuro esperanzador; tus obligaciones del presente”