Hoy es un día especial en Tierra Rapaz. Dos profesionales del mundo de la conservación del  medio natural, Pablo Santos Redín (Biólogo de Espacios Naturales de la Junta de Castilla y León y Técnico responsable del Centro del Lobo Ibérico) y Silvia Martín (Jefa de Veterinarios del Centro del Lobo Ibérico de la Junta de Castilla y León), vienen desde tierras zamoranas, llenos de ilusión para impartir unas charlas educativas sobre el Lobo Ibérico a los niños del Campamento de Biología Tierra Rapaz. Como Pablo y Silvia, cada semana, científicos y profesionales del mundo del medio ambiente, aportarán sus conocimientos a los niños en este Campamento único.

 

Esto es sólo una pequeña aportación del esfuerzo educativo que el parque ejerce cada temporada. Tierra Rapaz ha convertido a Calahorra en un punto de encuentro de miles de escolares procedentes de La Rioja, Aragón, Castilla y León, País Vasco, etc. En 2019 y hasta este momento, la cifra de estudiantes que han visitado el parque de la naturaleza ha sido de 12467. Durante los meses de marzo a Junio, los calagurritanos han podido ver a todos esos autobuses cargados de ilusión, dirigiéndose por las calles de la ciudad hacia el parque temático. También han sido muchos los chavales que han optado por detenerse en las calles y parques de Calahorra, para conocerla y disfrutar de ella unas horas, aprendiendo sus valores históricos, gastronómicos y vanguardistas, de la que un día era conocida como Calagurris Nassica Iulia. Tierra rapaz es en la actualidad uno de los puntos más importantes de España en visitas de escolares y sus gestores agradecen a los centros educativos,  la confianza que  depositan cada año en la labor docente que ejercen los profesionales del parque. Los escolares encuentran en Tierra  Rapaz un lugar donde las emociones y el conocimiento se dan la mano, en una alianza única. El parque realiza actividades varias de interacción con las  aves y grandes demostraciones  de vuelos educativas. En ellas, las aves replican sus comportamientos naturales, permitiendo a niños y adultos aprender todos los secretos de su biología. Los niños ven en directo los cuidados y mimos que reciben las numerosas aves irrecuperables que el parque mantiene y que solicita a la administración para evitar su sacrificio.

Esta temporada, se están recibiendo también numerosísimas visitas de centros de  personas con  discapacidad física o intelectual, así como otras en riesgo de exclusión social. En el parque estas personas encuentran un lugar donde relajarse, aprender e interactuar con los animales y la naturaleza. En muchos casos, el contacto con las aves supone  una terapia que estimula a estas personas de una manera increíble. Basta con mirar un segundo a personas con graves problemas de movilidad, cerebrales o de otra índole, sonreír cuando llevaban meses sin hacerlo, alargar sus brazos para tocar a un pollito de búho y sentirlo, emitir palabras o sonidos que habían dejado de expresar,  para darse cuenta, que la labor del parque y sus animales es además de preciosa, encomiable y necesaria. Otros grupos que frecuentan esta temporada el parque son las asociaciones culturales y de tiempo libre que encuentran en Tierra Rapaz un lugar donde confraternizar y establecer lazos en un ambiente diferente y lleno de magia, rodeado de seres especiales.

A las visitas de grupos citadas, hay que sumarle aquellas relativas a las de familias u otros grupos de particulares que van al parque  los fines de semana y festivos, y esta temporada, en agosto, se abrirá también un día entre semana. Turismo activo y de naturaleza, turismo de calidad que perdura, y que procede de esta iniciativa privada. Recordar en este punto, que decenas de miles de personas visitan Calahorra atraídos por Tierra Rapaz y muchas de ellas pernoctan, comen y compran en Calahorra, y la conocen a través de sus visitas al parque.  Los promotores de Tierra Rapaz quieren relatar en estas líneas el enorme orgullo que sienten de servir a la sociedad riojana y en especial a Calahorra, en una labor llena de esfuerzo y sacrificio, pero que sin duda compensa cuando ves la cara de aquellas personas  que en su visita encuentran  entre las aves del parque un ambiente alejado de sus problemas cotidianos, un ambiente propicio para soñar y sentir, rodeados de unos amigos especiales, que como el famoso anuncio de una marca muy reconocida, te dan alas para la vida.