Este fin de semana se han cumplido dos meses sin pacientes ingresados por COVID-19 en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital San Pedro de Logroño. El último paciente ingresado por la enfermedad en este control para los casos más graves fue dado de alta el pasado 23 de mayo y, desde entonces, ningún paciente ha requerido ser hospitalizado en la UCI por la infección por el virus SARS-CoV-2.

Desde el inicio de la pandemia, 91 personas han requerido su ingreso en la UCI del Hospital San Pedro de Logroño, un control que llegó a tener un máximo de 40 pacientes hospitalizados por la enfermedad el pasado 4 de abril.

El descenso de la presión asistencial en planta también ha evolucionado en los últimos meses. En comparación con los diez controles que llegaron a estar habilitados a principios de abril para pacientes de COVID-19, a primera hora de la mañana había dos personas ingresadas por la enfermedad en el control de Enfermedades Infecciosas del Hospital San Pedro de Logroño.

Para el director del Área de Salud de La Rioja, Alberto Lafuente, “en la nueva normalidad, ha cambiado la clínica de los afectados por COVID-19. Es mayoritariamente asintomático o tiene una sintomatología leve que sólo requiere aislamiento domiciliario. Son casos que se detectan por las numerosas pruebas diagnósticas que realizamos, tanto en el seguimiento de contactos de casos confirmados como en los procedimientos previos al ingreso. Pero no debemos bajar la guardia, ya que el coronavirus sigue entre nosotros y todos tenemos que ser conscientes de que, siguiendo las medidas de prevención, nos protegemos a nosotros mismos y a nuestros amigos o familiares”.

Hasta el 23 de julio, en La Rioja se han efectuado 45.871 pruebas PCR, con una ratio de 145,86 pruebas por millar de habitantes. Además, se han realizado también 36.721 test de anticuerpos de distinto tipo, incluyendo los denominados test rápidos y las pruebas de alta sensibilidad que discriminan los diferentes tipos de anticuerpos que generan las personas contagiadas.

Evolución epidemiológica

La Rioja ha notificado hoy al Ministerio de Sanidad la detección, el pasado viernes, de dieciséis nuevos casos confirmados de COVID-19, por lo que la cifra de personas con la enfermedad desde el inicio de la pandemia se sitúa en 4.185. El sábado y el domingo se realizaron 486 pruebas para detectar la enfermedad en la comunidad, pero no se identificaron nuevos casos de coronavirus.

Como parte de estos dieciséis casos confirmados, se ha comunicado la detección de un nuevo brote en el municipio de Santo Domingo de La Calzada, que afecta a tres personas: dos profesionales del Centro de Salud de la localidad y a un paciente. Los tres se encuentran asintomáticos y en aislamiento domiciliario.

El resto de los dieciséis confirmados se corresponden con casos aislados, contactos intrafamiliares o han sido identificados en el proceso de seguimiento de contactos de otros brotes activos. La mayoría de las personas afectadas se encuentran asintomáticas y están guardando el aislamiento en sus domicilios.

Actualmente, hay cinco brotes activos localizados en La Rioja. Los cinco están controlados y los servicios de vigilancia epidemiológica continúan realizando el seguimiento de los casos y contactos asociados para cortar la cadena de transmisión:

  • Brote en Logroño, notificado el 20 de julio: cinco casos confirmados.
  • Brote en Rioja Alta (Casalarreina, Haro y Briones), notificado el 22 de julio: seis casos confirmados.
  • Brote en Logroño, notificado el 23 de julio: once casos confirmados.
  • Brote en San Vicente de la Sonsierra, notificado el 23 de julio: tres casos confirmados.
  • Brote en Santo Domingo de La Calzada, notificado el 27 de julio:  tres casos confirmados.

Brotes no activos y con origen en otras CCAA

Además, el brote localizado en el Hospital San Pedro de Logroño, notificado el 13 de julio y que afectó a tres personas, no se considera activo actualmente, aunque no se puede dar por cerrado hasta pasados dos periodos de incubación (28 días).

Por otra parte, actualmente se han diagnosticado en La Rioja trece casos confirmados asociados un brote localizado de Aragón, cuyo vínculo epidemiológico fue una fiesta celebrada en Zaragoza.