El 60 por ciento de la población vio emporada la calidad del sueño durante el confinamiento, según un estudio realizado por la Unidad Multidisciplinar del Alta Complejidad del Sueño del Servicio Riojano de Salud (SERIS), servicio asistencial dirigido por Carlos Ruiz, jefe de la sección de Neumología.

La investigación, liderada por Alejandra Roncero, neumóloga del SERIS y coordinadora de la Unidad del Sueño y Ventilación, junto con las enfermeras de la Unidad, ha contado con la participación de cerca de 2.500 participantes con edades comprendidas entre los 20 y los 70 años. Entre las diferentes causas que han visto motivadas la afectación de la calidad del sueño, los ciudadanos encuestados han afirmado que sufrieron despertares frecuentes (57 por ciento), no pudieron iniciar el sueño en menos de 30 minutos (44 por ciento) o padecieron insomnio de mantenimiento (28 por ciento).

El estudio también ha revelado que una de cada dos personas modificó sus horarios de sueño, acostándose y levantándose más tarde en su amplia mayoría. Entre las personas que modificaron sus rutinas antes de acostarse, las actividades más frecuentes fueron: ver la televisión (49 por ciento), el uso del teléfono móvil (18 por ciento) y la lectura (14 por ciento).

En cuanto a la definición de su estado emocional durante el confinamiento, las personas encuestadas confirmaron que experimentaron preocupación (64 por ciento), ansiedad (36 por ciento) y tristeza (27 por ciento). El estudio también ha concluido que uno de cada cinco encuestados precisó medicación hipnótica durante el confinamiento causado por la pandemia.

Tratamiento de los trastornos del sueño

La Unidad Multidisciplinar del Sueño del SERIS es un servicio conformado por un equipo de especialistas de diferentes disciplinas, como son la Neumología, Neurofisiología Clínica, Pediatría, Neurología, Otorrinolaringología, Cirugía Maxilofacial, Psiquiatría, Psicología y Enfermería.

Para el desarrollo de las pruebas diagnósticas, la unidad dispone de dos habitaciones adaptadas en las que se llevan a cabo las diferentes pruebas que registran y graban las variables corporales de los pacientes mientras duermen.

Los trastornos del sueño son un problema de gran importancia tanto sanitaria como social. El insomnio crónico afecta a un diez por ciento de la población; un seis por ciento padece síndrome de apnea del sueño (paradas respiratorias durante el sueño) y el cinco por ciento sufre el síndrome de piernas inquietas.