El Partido Socialista, de la mano de su concejal Jesús María García, abordó ayer la situación industrial de la ciudad de Calahorra, incidiendo en que el acceso al polígono industrial del Recuenco no se abrirá esta legislatura, lo que los socialistas califican, sin duda, como un fracaso del alcalde Luis Martínez Portillo.

García recordó como dicho acceso no se pudo ejecutar en 2011 por una mala tramitación de la expropiación de los terrenos por parte del el Ayuntamiento de Calahorra, lo que provocó que la rotonda elevada prevista sobre la N-232 no se pudiera llevar a cabo al ganar los propietarios de los terrenos recursos contra el propio Ayuntamiento, recursos alguno de los cuales todavía siguen sin resolverse en los tribunales.

El concejal socialista también hizo referencia ayer a que hace 4 años, en el 2013, el alcalde Luis Martínez Portillo y el entonces consejero de Industria anunciaron, tras una reunión en Madrid con SEPES, que en un plazo de 18 meses estaría habilitada una entrada provisional al polígono del Recuenco, pero ya han pasado nada menos que 48 meses y García asegura que ‘ni hay acceso ni hay previsión de que lo haya’.

Por otro lado, Jesús María García asimismo aludió al compromiso de Martínez Portillo en su toma de posesión como alcalde de abrir el polígono del Recuenco pero el PSOE incide en que ‘ni lo ha cumplido ni parece que se vaya a cumplir en lo que queda de legislatura’, sobre todo tras conocer que la redacción de la separata para la apertura de este acceso al polígono sigue pendiente de la resolución de los juicios pendientes.

Finalmente, el Partido Socialista de Calahorra muestra su preocupación por el hecho de que desde hace años Calahorra no ve la implantación de nuevas empresas, sino que al contrario, paradójicamente, la ciudad ve como empresas abandonan la ciudad en busca de suelo industrial pese a tener un millón de metros cuadrados en El Recuenco.

Jesús María García exigió al alcalde de Calahorra que deje de lado su política de fachada y banalidad y que se preocupe de cuestiones tan fundamentales para la ciudad de Calahorra como es la política industrial abandonada desde hace ya muchos años.