La organización profesional agraria ARAG-ASAJA ha solicitado al Ministerio de Hacienda a través de ASAJA nacional la reducción de los índices de rendimiento neto del IRPF, correspondientes a la campaña de 2019, para los agricultores que están soportando cuantiosas pérdidas económicas por los daños causados por la sobrepoblación de fauna silvestre.

En el informe que acompaña esta solicitud, ARAG-ASAJA ha señalado daños en cultivos de cereales, frutales, hortalizas, olivar, almendro y viña en cincuenta municipios de La Rioja. Y en base a ello, considera que Hacienda podría atender esta problemática como una circunstancia excepcional y aplicar una reducción de los índices de módulos.

La organización también reclama este tratamiento para los diversos fenómenos meteorológicos adversos que tuvieron lugar el pasado año y que afectaron de forma importante a buena parte de las producciones agrarias de la región.

En el caso de la sequía, el informe de ARAG-ASAJA determina por esta causa una pérdida de producción del más del 30% en cereal en Rioja Media y Rioja Baja. Además, también causó la falta de engrosamiento del cultivo de la ciruela en toda su extensión, reduciendo en un 45% su comercialización en fresco con precios inferiores a los costes de producción. En cuanto a las producciones ganaderas extensivas (ovino, caprino, bovino), la sequía produjo la merma de un 60% de los pastos en la sierra riojana, lo que en algunos municipios se ha visto agravado por los ataques provocados por el lobo.

Respecto a las heladas, las temperaturas bajo cero que tuvieron lugar en abril y mayo del año pasado, tuvieron efectos muy negativos en la zona de Alfaro y Entrena donde el hielo daño en un 60% a los frutales de pepita y hueso, y de un 40% en peral en Albelda de Iregua. Por la misma causa, el viñedo tuvo un grado de afección media de un 35% en Rioja Alta y Rioja Media, alcanzando un 60% en algunos municipios de la comarca de Sierra Rioja Baja.

Por otro lado, los episodios de pedrisco también causaron pérdidas económicas importantes tanto en viña, cereal y frutales en muchos municipios de la Comunidad.

Asimismo, para ARAG-ASAJA es conveniente que se tenga en cuenta la crisis de mercado que están sufriendo los frutales de hueso y la ganadería extensiva en La Rioja, ya que ambos sectores se encuentran en una situación límite con un descenso de las explotaciones en un 40% desde 2005 y una pérdida del 50% de las explotaciones de ovino en los últimos años, por poner algún ejemplo.

Por todas estas razones, ARAG-ASAJA espera que estas peticiones se tengan en cuenta para obtener un tratamiento diferenciado en los índices de rendimiento neto aplicables en 2019 a las actividades agrícolas y ganaderas desarrolladas en los municipios o sectores señalados en el informe.

Por este motivo, además de trasladar dicha petición al Ministerio de Hacienda, la organización agraria también ha compartido el texto con las Consejerías de Hacienda y de Agricultura del Gobierno de La Rioja para que desde el Ejecutivo regional se apoye esta solicitud con las correspondientes gestiones ante la Administración central.