Unidos en una gran manifestación conjunta, vecinos y vecinas de los valles de Ocón, Jubera y Alto Cidacos acudirán masivamente mañana viernes, 30 de abril, a Logroño en defensa de sus territorios y por la paralización inmediata de todas las tramitaciones en marcha para la construcción de nuevos megaparques eólicos y fotovoltaicos en La Rioja. Las Plataformas por el Desarrollo Sostenible del Alto Cidacos y por el Progreso Sostenible de las Tierras Orientales de La Rioja invitan a los habitantes de toda la región a acompañarles en esta movilización especialmente trascendente para el futuro de sus comarcas. Con el fin de respetar escrupulosamente el protocolo covid, la organización solicita la colaboración de los asistentes para que se congreguen frente al palacete del Gobierno de La Rioja con anticipación a la hora prevista en la convocatoria, las 19:00 horas.


Bajo un lema principal unívoco, “Por un mundo rural vivo. ¡Renovables, así No!”, la marcha partirá desde Vara de Rey y discurrirá por las calles Muro de La Mata, María Zambrano, avda. de Portugal y Miguel Villanueva hasta alcanzar el Espolón, donde se leerá un manifiesto común sobre el espacio conocido como «La Concha». “No son molinos, son gigantes”, “Ya producimos más de lo que consumimos”, “Geopaque, Sí; Megaparque, No” serán también algunos de los mensajes presentes en las distintas pancartas; además, podrán leerse claramente otros sobradamente conocidos, como “La Rioja InSOStenible” o “No nos vamos, nos echan”.
A fin de evitar aglomeraciones, los manifestantes caminarán en filas paralelas, arropando así a las columnas centrales, cuyos integrantes determinarán los tiempos de una movilización que se pretende activa y dinámica. Durante el recorrido, simularán una torre de alta tensión de 54m. Asimismo y, en calidad de refugiados medioambientales, avanzarán acompañados de sus maletas. Aquella hipotética Despoblación Rural Forzosa que, hace unas semanas, viera la luz simultáneamente en los pueblos afectados, será recreada mañana viernes por las calles logroñesas para concienciar sobre las terribles consecuencias que acarrearían estas macroinstalaciones, convirtiendo en eriales, en desiertos fantasmas lo que hoy es un mundo rural rico que mira hacia adelante.
Jubera I, Jubera II, Aldealobos, Ausejo-Ocón, Valderrete y Los Cruzados son los seis macroparques eólicos previstos en estas zonas. De no impedirlo, 68 colosales aerogeneradores de casi 200m, solo superados en altura por las cuatro torres de Madrid, se elevarán sobre los valles de Ocón, Jubera y el Alto Cidacos contaminando sus horizontes. Quedarán a escasa distancia de muchas viviendas e invadirán paisajes, generarán un tremendo impacto visual y daños irreversibles en la Enorregión, comprometerán la propia Reserva de La Biosfera o el futuro Geoparque Unesco. Kilómetros de líneas aéreas de alta tensión, con sus correspondientes torres, partirán por la mitad pueblos enteros y dividirán La Rioja de sur a norte. Consecuentemente, se mermarán los espacios forestales, la flora y la fauna; no solo los cultivos agrícolas de viñedo, olivo, cereal o almendro se verán empobrecidos, sino también, la ganadería; afectarán gravemente al patrimonio paleontológico, arqueológico y arquitectónico y, por ende, al turismo. Agotados estos valiosos recursos, los medios y modos de vida de sus pobladores, su cultura, pensamiento y su propio futuro pasarán a ser solo historia en el omnipresente “reto demográfico”.

Precisamente para evitar ese cerco que, tan a menudo, se oculta bajo la etiqueta “renovable”, las dos plataformas trabajan solidariamente en diferentes ámbitos. Presentadas ya alegaciones a Jubera II, Ausejo-Ocón y otras infraestructuras fotovoltaicas, en breve llegará el turno a Valderrete y Los Cruzados. Conscientes de que luchan contra gigantes, consideran sumamente necesario gritar al unísono “No es un caso aislado, solidaridad entre valles afectados” “Nos quieren echar: ¡Asilo, asilo, Asilo masivo” “Multinacionales, fuera de nuestros valles”. Y alzar, así, la razón para defender, preservar y promover, ante las administraciones competentes, ese Mundo Rural Vivo que pueblan, íntimamente vinculado al territorio donde fue creado.