Un total de 41 centros educativos públicos y privados concertados de La Rioja han abierto las aulas esta semana para recibir a más de 400 alumnos y alumnas diarios desde que el pasado martes la educación riojana entró en la Fase 2 de la desescalada.

El pasado martes día 26 fue el primer día de apertura de las aulas en 17 centros, que recibieron a 347 alumnos y alumnas con necesidades educativas concretas y retos académicos relevantes. En los días sucesivos, la actividad se ha incrementado hasta los 437 alumnos recibidos el miércoles, 452 el jueves y 408 este viernes.
El regreso a las aulas ha sido de carácter voluntario, paulatino, y siempre en grupos muy reducidos y en horarios escalonados para evitar aglomeraciones. Asimismo, los propios centros se han adecuado a los protocolos de seguridad e higiene, y repartido mascarillas y otros utensilios facilitados por la Consejería de Educación y Cultura. Estos alumnos, cuyo regreso puntual a las aulas se ha producido por prescripción pedagógica de sus tutores y como complemento a la formación a distancia que están recibiendo en este final de curso, han acudido para realizar actividades de refuerzo educativo, paliar situaciones de brecha digital o bien para la preparación de retos académicos relevantes como la EBAU.
Los centros abiertos han sido quince Centros de Educación Infantil y Primaria (CEIP) de toda la región, cinco Colegios Rurales Agrupados (CRA), cinco Centros de Educación para adultos (CEPA), un Centro de Educación Obligatoria (CEO), siete Colegios Privados Concertados (CPC), seis Institutos de Educación Secundaria (IES) y dos conservatorios.


Formación


Por otro lado, la píldora formativa Orientaciones sobre los Protocolos de Seguridad y Salud en Centros Educativos promovida desde la Consejería de Educación y Cultura cuenta actualmente con 3.231 docentes inscritos, de los cuales han finalizado 2.418 y se han descargado 1.583 diplomas. Esta acción de carácter formativo es otro de los acuerdos recogidos en el Pacto Social por la Reconstrucción Educativa y se dirige a mejorar las competencias del profesorado riojano en esta nueva etapa excepcional surgida a raíz de la pandemia del coronavirus.